“Yo seré para ella, dice Jehová, muro de fuego en derredor, y seré la gloria en medio de ella.” – Zacarías 2:5
Reflexión:
A veces despertamos con el cuerpo cansado, con el corazón ansioso y la mente llena de pendientes. Nos rodean citas legales, deudas, decisiones importantes, palabras que duelen, y caminos que parecen cerrados. Pero aun así, el Señor dice: “Yo soy tu muro de fuego.”
Ese fuego no solo es defensa, es también presencia gloriosa. No necesitas construir muros humanos, Dios mismo es el que te rodea. Él te guarda, te guía y te llena de esperanza aun cuando el entorno parezca oscuro.
Hoy quizás no recuerdes el sueño, pero sí el milagro: el dolor se fue, la oración salió desde el alma, y la Palabra fue viva para ti. Y eso ya es suficiente para saber que Dios sigue actuando a tu favor.
Oración:
Señor, gracias por rodearme con tu fuego. Gracias por ser mi escudo en los días de lucha y mi paz en medio del juicio. Perdóname por no ver tus milagros en lo cotidiano. Ayúdame a reconocerte en cada detalle, a confiar como pueblo tuyo, y a avanzar sabiendo que Tú peleas por mí. Amén.
Desafío:
Hoy entrega cada carga en oración, celebra cada avance con gratitud, y proclama que el Señor es tu defensor. Repite durante el día:
“Tú eres mi muro de fuego, mi gloria, mi guardador.”
Con amor,
Lazos de Amor